Muchas veces sentimos que es el momento de hacer un parón y tratar de recuperar la motivación y el foco en el negocio.
Porque no, no todo es de color de rosa ni resulta tan sencillo como parecía. De hecho, el cansancio acumulado puede hacer que el proyecto que tanta ilusión te hacía al principio ahora sea una fuente de estrés y de insatisfacción.
Esto al final hace que te sientas sin energía, sin ganas de salir ahí fuera a mostrar lo que haces o incluso que termines abandonando las metas que te habías propuesto porque el bloqueo no te deja avanzar.
Perder la motivación y el foco es normal alguna vez, y por eso es importante tomar acción y volver a encender ese motor que nos mueve cada día.
¿Y por dónde puedes empezar? Quédate leyendo que te lo cuento todo paso a paso.
Recuperar la motivación y el foco en tu negocio
#1 – Analiza el origen y pregúntate si quieres seguir adelante
Hay muchas cosas en tu mano que puedes hacer para recuperar la motivación en tu negocio y volver a enfocarte en tus metas, pero es primordial que antes de ponerte en marcha, hagas un STOP y te preguntes por qué estás sintiéndote así.
Así que mi primer consejo es que busques un papel y un boli y te sientes a escribir acerca de todo lo que pasa por tu mente.
Pregúntate qué es lo que te absorbe la energía, cuáles son las actividades que realizas que más te drenan y también qué es lo que te gustaría estar haciendo y no haces.
Escribe sin miedo, nadie va a juzgarte. Suéltalo. Dale espacio y voz.
Puede que descubras que es cansancio, que es algún tipo de tarea en concreto lo que no te motiva, que te estás exigiendo demasiado o incluso que el rumbo que tomaste no es el que realmente quieres ahora.
Porque ya sabes que la vida es constante cambio, y por eso decisiones que tomamos en el pasado en el presente ya no nos llenen.
Si descubres el origen de tu desmotivación, podrás encontrar soluciones. Tal vez sea acotar el tiempo que le dedicas al negocio para dejar espacio para otras cosas importantes en tu vida, o delegar algunas tareas, cambiar de especialización o directamente dejar el proyecto.
Dedícale el tiempo necesario a este primer punto, y si realmente estás seguro que quieres seguir adelante con el proyecto, continúa al siguiente paso.
#2 – Encuentra lo que no te gusta de tu situación actual
Si has hecho el anterior ejercicio, ya tendrás algunas pistas de lo que no te gusta en tu día a día.
Porque que no te engañen: eso de “trabaja de tu pasión y no volverás a trabajar ningún día en tu vida” es una frase muy bonita, pero más bien irreal.
Por más que te encante lo que haces, tendrás que hacer algunas cosas que te gusten más y otras menos. Eso es así.
La buena noticia es que si las detectas, podrás enfrentarte a ellas desde otra perspectiva.
Por ejemplo, si te das cuenta que a ti todo lo que supone la parte del marketing te agota, puedes pedir ayuda para que te apoyen. O si es todo el tema de la contabilidad, lo mismo.
Si son tareas que tienes que hacer tú sí o sí (ya sea porque no tienes presupuesto para delegarlas o porque te resulta muy complicado) puedes bloquear tiempo en tu agenda para hacerlo, por ejemplo, a primera hora del lunes y ya estar toda la semana enfocado sabiendo que te lo has quitado de encima.
Lo que está claro es que no es buena idea seguir haciendo lo que has hecho hasta ahora, porque ya has visto hasta que punto es capaz de llevarte.
Para tener resultados diferentes, hay que hacer cosas diferentes 🙂
#3 – Pregúntate qué es lo que te hace sentir bien y feliz
Decía un anuncio de una hamburguesería famosísima que su hamburguesa llevaba “más de lo rico”.
Y esa es la tercera propuesta que quiero hacerte para que recuperes la motivación y el foco: que en tu vida haya más de lo que te gusta.
Para ello, ¿tienes claro qué es lo que te gusta? ¿Sabes qué es lo que te hace sentir bien, disfrutando, despreocupado y feliz?
Si no lo sabes, este es el momento de preguntártelo.
En tu vida, y a poder ser todos los días, tiene que haber espacio para ello. Y a poder ser, actividades que disfrutes en tu vida personal y también en tu vida profesional.
Si en tu trabajo lo que más te gusta son las sesiones con clientes, reserva tiempo cada día para ello y recárgate de energía.
Y cuando termines tu jornada, incluye tiempo para disfrutar de lo que te hace sentir bien en tu vida personal: desde salir a andar con tu pareja o con tu perro, hasta jugar con tus peques, ir a jugar al pádel, nadar, leer o ver un par de capítulos en Netflix.
Eso será lo que te mantendrá oxigenado, pues será lo que le dará sentido a tu día a día y te ayudará a seguir avanzando.
#4 – Dedícale tiempo de calidad a las áreas de tu vida
¿Cuántas veces has estado atendiendo temas personales en horario de trabajo, o viceversa? ¿Atendiendo temas de trabajo fuera de horario laboral?
Al final no estás ni en un lado ni en otro. Y eso es un grave error que todos hemos cometido y que nos drena energía al máximo.
Una de las claves para mantenernos en foco es el tiempo de calidad que le dedicamos a cada área de nuestra vida.
Cuando estás trabajando, concéntrate en dedicarle tiempo de calidad a lo que haces. Cuando estés realizando actividades con tu familia, así sea ver la televisión, dedica ese tiempo con calidad (y no mirando un email en el móvil mientras tu pareja te está contando algo).
Si eres capaz de acotar el tiempo que le dedicas a cada cosa, mediante rutinas y horarios, verás como tus niveles de energía se mantienen estables y con ello tu motivación es mucho mayor.
#5 – Acciona con objetivos alcanzables y retadores
Si hay algo que resulta motivador es, sin duda, ver resultados.
Es como cuando quieres perder peso y comienzas a ver los primeros cambios al mes: te sientes tan bien que automáticamente te motivas a seguir imparable.
Así que con el negocio, funciona de manera similar: para recuperar la motivación, ponte en marcha.
Márcate pequeños objetivos (ya sabes, que sean SMART) y comienza poco a poco, pero sin pausa. En cuanto empieces a ver como los cumples, te motivarás a seguir y a seguir.
#6 – Busca una red de apoyo
Seguramente que ya has oído la frase de que «somos la media de las 5 personas con las que más tiempo pasamos».
Por eso es importante rodearse de personas que nos inspiren, que nos sumen y que nos sostengan cuando lo necesitemos. Y en muchas ocasiones, una red de apoyo es un recurso fundamental para recuperar la motivación y el foco en el negocio.
Puedes encontrar personas que te apoyen en tu círculo personal, o encontrar emprendedores que vivan las mismas experiencias que tú en su día a día y formar parte de, por ejemplo, un mastermind, en el que poder hablar, compartir tus preocupaciones y encontrar nuevas ideas para volver a ilusionarte.
#7 – Autocuidado como prioridad para recuperar la motivación
A veces, todo es una cuestión tan simple como que nos sentimos desmotivados porque estamos agotados físicamente.
Y no, no todo es cuestión de dormir por la noche, comer bien, beber agua y hacer algo de ejercicio (que ya sabes que es esencial, especialmente cuando emprendes).
En muchas ocasiones nos agotamos porque estamos desgastados emocionalmente, porque hemos asumido ciertas cosas que no nos corresponden, o porque no sabemos qué decisión tomar o qué camino seguir.
Esto significa que la solución para recuperar tu motivación y foco puede ser, sencillamente, pedir ayuda.
Ya sea de un profesional del desarrollo personal, bienestar o espiritual, o de un profesional de negocios que te pueda acompañar y ayudarte a reorientar tu proyecto.
Pedir ayuda también forma parte del autocuidado, y puede ser la clave para encontrar el punto de inflexión con el que recuperar la ilusión por lo que estas creando.
Sea como sea, recuerda que es una etapa que también pasará, y que te traerá un aprendizaje súper valioso para tu vida profesional y también personal.
Cuéntame, ¿Qué es lo que haces tú para recuperar la motivación?
El momento adecuado no existe, se crea. Si quieres darle un buen empujón a tu negocio de coaching o psicología, tengo un servicio individual y personalizado que te puede interesar.
Se llama «Mentoring de 0 a 100» donde te ofrezco, en todo el momento, un apoyo emocional y profesional para que puedas crear un negocio extraordinario que te permita vivir (muy) bien de ello.
Quizás también te interese:
Cómo preparar el verano en tu consulta de coaching
Cómo crear un negocio sin inversión inicial
0 Comentarios